Labradorita parece tener múltiples colores entre los que se incluyen azul, verde y naranja, que en realidad son rayos de luz reflejados desde diferentes superficies gemelas de la piedra. Esto se conoce como el efecto 'Schiller'. Labradorita se encontró por primera vez en Canadá; ahora hay minas en Finlandia, Rusia y Madagascar. Es apreciada por su iridiscencia brillante y es popular para gemas y cabujones.